Mis aplicaciones imprescindibles en Mac

Mi escritorio...
Mi escritorio...

Hace unos meses completé mi «transición» a Mac, cediendo mi ordenador de sobremesa y cambiándolo por un iMac. Aproveché que un compañero tenía el modelo de 24 pulgadas y se actualizó al de 27» para comprárselo de segunda mano. También estuve miranos anuncios de clasificados en España en portales como MundoAnuncio, pero al final mi amigo era quien me hacía la mejor oferta.

Las 24 pulgadas se me hicieron grandes los primeros días, pero el espacio en la pantalla es algo a lo que te acostumbras rápido (o al menos yo me adapto sin problema siempre que sea a más…). Además, aproveché el antiguo monitor de 19» como segundo monitor del ordenador, y así completo una terna con la que da gusto trabajar: el iMac de 24 + 19 y el Macbook Pro de 15». Evidentemente, a veces no me hace falta «tanta pantalla» y descarto alguno de los ordenadores, pero otras veces sí lo aprovecho. Por ejemplo: edición de textos en un monitor, retoque fotográfico en el otro, una máquina virtual en el portátil y un par de navegadores abiertos… es algo que podría hacer perfectamente abriendo y cerrando aplicaciones, pero me resulta mucho más rápido y, sobre todo, cómodo, poder tenerlo todo al alcance de la mano a la vez.

El uso que le doy sigue siendo similar al que tenía cuando usaba el sobremesa con Linux: servidor de descargas y de ficheros, almacén de documentos y trabajo de vez en cuando con él. Ver vídeos también es mucho más cómodo, ya que de hecho la pantalla del iMac es más grande que la TV que uso para ver el TDT y jugar a la XBOX.

El caso es que al haber pasado ya por tres macs hay una serie de aplicaciones que se han convertido en mis «imprescindibles», después de haber probado otro montón para y descartar unas cuantas. Remarco que las aplicaciones que pongo son mis imprescindibles, porque me resultan estúpidas esas listas genéricas que pretenden hacer un recopilatorio de las aplicaciones que la gente debería usar, cuando cada uno tiene sus propias necesidades…

  • Google Chrome / Firefox: uso Chrome como navegador principal sobre todo porque es muy rápido y al tener los procesos separados por pestañas un casque de Flash no hace que todo el navegador se quede inútil, pero a veces uso Firefox sobre todo porque me gusta más Firebug para desarrollar que la extensión de Chrome / Safari.
  • Grooveshark / Spotify: para la música en streaming uso estas dos aplicaciones. Soy usuario VIP de Grooveshark y últimamente la uso más, pero su aplicación nativa está hecha en Adobe AIR y experiencia de uso de la de Spotify (que es nativa) es mejor (pero lo uso cada vez menos por los anuncios, que Grooveshark no tiene).
  • Echofon: mi cliente de twitter favorito, tras haber pasado por Tweetie pero acabar cansado de sus nulas actualizaciones. Tiene previsualización de imágenes, atajos de teclado, es multicuenta, acortador de enlaces, notificaciones con Growl…
  • Adium: el cliente multiprotocolo por excelencia de Mac. Es la versión para Mac de Pidgin, y soporta las cuentas que necesito (Gtalk, Facebook, Msn).
  • Dropbox: para sincronizar archivos con la web, con otros ordenadores y tenerlos siempre disponibles. Uso la cuenta para tener algunos proyectos accesibles siempre, a modo de control de versiones casero (sólo los uso yo).
  • Evernote: lo mismo que con Dropbox, pero para sincronizar pequeñas notas (para documentos más grandes uso Google Docs).
  • Transmission: cliente de torrents cuya interfaz web uso desde el móvil (con transdroid) para las descargas. En lo posible uso P2P más que descargas directas…
  • Textwrangler / Smultron: en Leopard usaba más Smultron, pero desde la actualización no funciona muy fino así que me he pasado a Textwrangler. Tengo pendiente probar Fraise, el fork de Smultron…
  • Google Quick Search Box: Spotlight es genial, pero para tareas sencillas como abrir una aplicación me resulta un poco pesado/lento, tarea para la que es perfecta la caja de búsqueda rápida de Google, a la que se le puede asociar un atajo de teclado.
  • Google Notifier for Mac: añade un par de iconos al tray con notificaciones de Gmail / Google Calendar.
  • Cyberduck: cliente FTP / SFTP opensource.
  • Netbeans / Eclipse: para desarrollar en PHP/Java/edición de archivos en proyectos uso cualquiera de los dos. Últimamente prefiero Netbeans, y su interfaz en Mac me gusta más. Para cacharrear en las bases de datos uso Sequel Pro (a pesar de lo que parece indicar el nombre, es gratis y open source).
  • Movist: mi reproductor de vídeo favorito. Bastante ligero, con buen soporte para subtítulos, libre y aceptablemente estable. Tengo pendiente probar Lunettes, el VLC renovado…
  • Perian / Flip4Mac / Soleol: Perian y Flip4Mac los uso para tener todos los codecs que me suelen hacer falta, mientras que SolEol es muy útil para descargar los subtítulos de las series / películas.
  • OpenOffice.org: para editar documentos suelo tirar de Google Docs, para tenerlos disponibles en cualquier lugar, aunque si necesito hacer algo más específico (documentos con imágenes o más complejos) tiro de OpenOffice.
  • Picasa / Flickr Uploadr / picasa2flickr: suelo usar Picasa para ediciones en masa sencillas, con el botón de picasa2flickr que permite invocar al Flickr Uploader con las imágenes seleccionadas en el programa. Menos integrado que con Picasa, pero bastante cómodo.
  • Automator / Terminal: con Automator automatizo algunas tareas rutinarias de gestión de archivos y carpetas, redimensionamiento de imágenes, renombrado de ficheros… y más que podría hacer, es comodísimo! Terminal lo uso para las aplicaciones de línea de comandos, como los SDKs de Android y Google App Engine, svn, o conexiones SSH.

Creo que no me dejo nada de lo «básico», lo que instalo sí o sí cuando cambio de PC. Espero que la lista le sea útil a alguien… y no dudéis en comentar si sabéis alguna aplicación mejor que las que uso!

Nexus One vs HTC Magic

Desde hace unas semanas tengo uno de los «Google Phones», los teléfonos fabricados por HTC que Google vende con su propia marca, con el nombre de «Nexus One». Aún no está a la venta en Europa, aunque pronto estará disponible en el Reino Unido y después en el resto de Europa, disponible con Vodafone. Ahora mismo es el mejor teléfono con Android, a falta de salir el HTC Desire, y es una gozada usarlo.

Antes usaba el HTC Magic, del que tengo un buen sabor de boca en su uso general, pero que para determinadas tareas se me quedaba corto. Me gusta que es pequeño, los materiales aunque son de plástico tienen un buen tacto y se siente robusto (ha aguantado más o menos bien a alguna caída desde media altura), y si no se le exige demasiado responde bien (con varias aplicaciones simultáneas tiene más problemas).

El Magic se me quedaba corto a veces, sobre todo en memoria: perdía notificaciones de correo debido a que se quedaba sin RAM disponible, y el teléfono necesitaba cerrar alguna aplicación que se ejecutase de fondo (las notificaciones de twitter, el correo, navegador…). Al hacerlo automáticamente y de forma transparente, no causa más transtorno trastorno que el de tener la aplicación cerrada, pero a veces resultaba molesto.

El Nexus One me resulta como un Magic a lo grande. En tamaño no es mucho mayor (de hecho, es incluso más fino), pero el tamaño y calidad de la pantalla hacen que parezca mucho más grande. De primeras, es la mayor diferencia: la pantalla del Nexus es muy buena, con una resolución de 800 x 400 px y una densidad de 252 puntos por pulgada en 3.7» (el Magic tiene 480 x 220 en 3.2» de tamaño, con 181 DPI). Para comparar, el Macbook Pro de 15 pulgadas tiene 110 DPI: se ve muy bien. Los colores son brillantes, ajusta el brillo automáticamente en función de la luz ambiente y además la respuesta es muy buena (y multitáctil).

Al tacto también se nota distinto. El Nexus tiene la parte delantera en metal y la trasera en teflón, que le da un tacto no resbaladizo muy bueno (y no atrae manchas como el plástico brillante del Magic). Los botones son «virtuales», estando situados sobre la pantalla, y aunque es menos fácil acertar sobre ellos a tientas que en el Magic, lo compensan en parte con el feedback háptico del teléfono (las pulsaciones sobre los botones, así como sobre ciertos elementos del teléfono como el teclado, se sienten con pequeñas vibraciones).

En el uso hay muchas diferencias. El tamaño de la pantalla (y su resolución) hacen más cómodo trabajar con aplicaciones que muestran mucho texto en pantalla, y se nota mucha diferencia en aplicaciones como el GPS o Google Maps. El teclado es más cómodo también, al ser más grande el espacio que ocupa. Al usarlo para hablar se nota un sonido más claro, gracias que tiene dos micrófonos y usa uno de ellos para la cancelación del sonido ambiente.

A nivel de rendimiento hay un mundo de diferencia. El Nexus One tiene un procesador de 1GHz y 512MB de RAM, frente a los 528MHz de procesador y 192 Mb de RAM del Magic (la versión española venía con menos RAM, y eso la lastra bastante en el rendimiento multitarea). Usando el Nexus es rara la aplicación que tiene cuelgues porque el teléfono no de abasto (en el Magic era relativamente frecuente visitando páginas web complejas pesadas, por ejemplo), y la respuesta se siente inmediata casi siempre. La batería también dura más en el Nexus One, siendo de más capacidad y no sé si hará mejor uso de la energía…

También hay diferencia en el sistema operativo. El Nexus One viene con la versión 2.1 de Android, que es una adaptación de Eclair, la versión 2.0. Oficialmente, para el Magic no está disponible (todavía) la versión 2.0, aunque al cambiarle la ROM y usar la de CyanogenMod tiene ciertas partes traídas de la última versión y bastantes mejoras en rendimiento. En general se nota en la estética del sistema operativo, las aplicaciones de Google (Gmail sobre todo) están renovadas, y se supone que mejoras en el rendimiento (aunque al tener el doble de procesador el Nexus no vale para comparar sólo S.O.).

En líneas generales me gusta mucho más el Nexus, las pegas que le podría poner al Magic (carencia de salida estándar de auriculares, cuelgues en aplicaciones, rendimiento mejorable) están todas resueltas con nota (a excepción de no tener Radio FM, por cierto). Estéticamente me gusta, en rendimiento es genial, y también es hackeable (tengo pendiente probar la ROM de Cyanogen para el Nexus One, que presumiblmente mejorará considerablemente su rendimiento).

También tiene puntos flojos, como lo rápido que se ensucia su pantalla (el iPhone tiene una capa oleofóbica que repele en parte la suciedad por usarlo con los dedos), la mala respuesta de los botones integrados en la pantalla o la baja legibilidad a plena luz solar… pero los puntos fuertes también son muchos e interesantes.

Pero bueno, ya vale de tanta tontería y tanto texto. Os dejo con un vídeo del uso de los dos móviles, en el que mi idea era enseñar la diferencia en la velocidad de respuesta de ambos (con Triángulo de Amor Bizarro de fondo), y unas cuantas fotos…

[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=xzLU2eH8lD8[/youtube]

Si tenéis dudas acerca de cualquiera de los dos teléfonos o comparaciones entre algo de ellos, ¡aprovechad!

Mis aplicaciones imprescindibles de Android

Android Market

Llevo ya unos meses usando Android (en el HTC Magic), y lo he «formateado» varias veces para probar distintas ROMs del teléfono o actualizar la que ahora mantengo en él, la desarrollada por cyanogen (que está mucho más actualizada y mejorada que la que viene de fábrica, no hay color).

El caso en que en estos meses hay algunas aplicaciones que he mantenido y uso a menudo, más allá de las curiosas a las que apenas se les saca partido. Varias son de pago, pero en este tipo de aplicaciones no me molesta demasiado pagar, ya que son precios muy razonables (menores a 5€ normalmente), y suelen ser desarrolladas por estudios independientes (o unipersonales).

  • MyBackupPro (5$): ya que empiezo hablando de los formateos del teléfono, empiezo por esta aplicación imprescindible para ello. Permite sacar una copia de seguridad tanto de los datos (mensajes, llamadas, preferencias, alarmas, favoritos…), como las aplicaciones instaladas. Con ello genera un zip, que una vez reinstalado el teléfono podremos restaurar (las aplicaciones es un poco coñazo, porque hay que ir una a una, eso sí). Además, se puede programar el backup para tener copia de seguridad actualizada siempre.
  • Klaxon (2$): es una alarma mejorada, que ya usaba en Windows Mobile (y gracias a su código aprendí bastante sobre esta plataforma). Respecto a la alarma de Android, la mayor mejora es que permite retrasar la alarma agitándolo o dándole la vuelta.
  • Twidroid Pro (3.39€): es un cliente para Twitter bastante completo. Permite acortar URLs, subir vídeos y fotos, búsquedas, listas, visitar perfiles y demás, pero hay una razón por la que uso la versión de pago y no la gratuita: soporta varias cuentas simultáneas (de una manera bastante cómoda, además). Hasta hace unos días simultaneaba varios clientes de twitter para usar varias cuentas (Twidroid gratis, Twicca, Seesmic…), pero es mucho más cómodo tenerlo todo centralizado.
  • Chompsms: esta aplicación reemplaza a la de Android para gestionar SMS (leerlos y enviarlos). Básicamente la uso porque es más agradable a la vista que la del sistema y permite ver las fotos de los contactos junto a los SMS, aunque es un poquillo más lenta que la oficial. La uso desde hace mucho y no tiene demasiadas mejoras, probablemente haya alguna opción superior.
  • Tunewiki: es un reproductor multimedia muy muy interesante. Permite reproducir radios de shoutcast, con lo cual tiene un catálogo bastante interesante,  y durante la reproducción de las canciones (ya sean locales o mediante streaming) mostrará información (letras, portada, año, etc.). Muy útil, y sorprendemente gratis.
  • FXCamera / Camera Zoom FX (1.29 libras): son las cámaras de fotos que uso. Permiten darle efectos a la imagen, y tengo configurado FXCamera para sacar las fotos pequeñas (mejor para subir a twitter), y Camera Zoom FX para las fotos a tamaño completo, con antishock y demás. Cuando compré la segunda aún no había salido la gratuita, eso sí…
  • FlickrDroid (3.99$): cliente de Flickr que permite subir las fotos tras autenticar a la aplicación, y ver fotos de Flickr. Muy útil para poner fondos de pantalla o imágenes de contacto. También podría subir las imágenes desde el email, pero me gusta la funcionalidad de buscar fotos.
  • Shazam: permite identificar la canción que está sonando tras grabar un fragmento y enviarla a los servidores de la aplicación. Funciona muy bien…
  • Escáner de códigos de barras: no es que juegue a ser cajero de supermercado, sino que meter las URL en el navegador de Android es incómodo, y resulta mucho más práctico generar el código QR de la página actual [con este bookmarklet es un segundo:
    javascript:void(open('http://chart.apis.google.com/chart?cht=qr&chs=300x300&chl='+encodeURIComponent(getSelection()+""||location.href),'','width=320,height=320'))]. Además, la búsqueda del Market (y el Market en general) va bastante mal, así que mejor ir a tiro fijo y cargar directamente la aplicación que se quiere mediante el código de barras.
  • PKT Auctions Ebay: esta aplicacioncilla de ebay permite saber el estado de las pujas, buscar productos y pujar. Tiene notificaciones en caso de sobrepuja, y gracias a ella he ganado alguna puja en el último minuto, razón por la cual la adoro. Aunque no cobren, pagaría por ella.
  • Nimbuzz / Meebo / Fring: clientes de mensajería multiprotocolo, que se conectan a Gtalk, msn, Facebook, Yahoo… Últimamente uso más Nimbuzz, porque Meebo se desconectaba solo muchas veces. Fring es un poco especial, ya que también se conecta a Skype y permite VoIP.
  • Todas las aplicaciones de Google: sino todas, casi todas. Google Maps, Gmail, Google Talk, Listen, Goggles, Google Sky Map, el Navegador… Normalmente no demasiado vistosas, pero tremendamente funcionales.
  • Wapedia: un cliente nativo de la wikipedia (en varios idiomas), en el que carga realmente rápido y con el formato completamente adaptado a la pantalla del teléfono.
  • Magic-8-Ball: probablemente una de las aplicaciones menos útiles y más simples que haya por el market, pero siempre tiene un hueco en mi pantalla principal. Me resulta estúpidamente divertido preguntarle cosas a la bola!!
    
    

Hay algunas más que instalo siempre, pero quizás estas sean también las que más uso. Quizás de algunas conozcáis mejores reemplazos, o simplemente sepais de alguna perla oculta en el Market sin la que no podéis pasar… estaría bien que me la comentaseis, quiero probar más aplicaciones, sin tener que bucear entre todo el Market! :-)

Cómo comprar juegos de consola baratos

Un par de juegos que me agencié en Amazon.uk...
Un par de juegos que me agencié en Amazon.uk...

Hace unos días un compañero de trabajo me pidió referencias de las webs que uso para compras juegos baratos en el extranjero, y le hice una pequeña lista de las que uso a menudo.

Sobre todo compro a Inglaterra, ya que los gastos de envío son razonables, los juegos llegan medianamente pronto y, sobre todo, el euro está casi a la par que la libra. Es realmente excesivo e injusto el precio de los juegos en España (los estrenos de Xbox, por 70€), así que aquí en tiendas físicas no compro más que ofertas y juegos de segunda mano (y eso cuando están bien de precio, que a veces salen mejor cogidos en Inglaterra nuevos).

Normalmente uso un buscador, http://www.find-games.co.uk/, para ver en qué tienda inglesa están más baratos los juegos que me interesen. Ofertas aparte, algunas de las que tienen los mejores precios normalmente son:

  • play.com, que tiene buenos precios y no cobra gastos de envío.
  • thehut.com
  • amazon.co.uk, que vale para comprar de todo y también tiene una buena sección de videojuegos

También vale la pena mirar en ebay.co.uk, se encuentran chollos en juegos de segunda mano (los videojuegos se devalúan mucho al comprarlos, y a mi me da igual jugar a DVDs usados mientras la consola los lea sin problema).

Por otra parte, al comprar juegos en el extranjero, está la duda de si incluirán el español. Para ello, hay unos cuantos hilos en los foros de El Otro Lado (en versión wiki o foro, ambos para la Xbox360 pero también los hay para PS3) en los que consultar la compatibilidad de los juegos extranjeros. En ese foro también tienen un par de hilos muy muy útiles para la Xbox, uno con ofertas internacionales y otro con ofertas nacionales.

Comprándolos fuera es raro que pague más de 30€ por juegos bastante modernos, mientras que aquí pagaría por ellos más del doble. Otras veces vale la pena aprovechar ofertas buenas (y puntuales) del comercio local, pero para juegos recientes no es lo común (en fondo de catálogo los precios se van igualando cuando pasa bastante tiempo).

Obsolescencia Planificada: una ingeniería poco ética

La obsolescencia planificada es el proceso por el cual un producto o servicio se vuelve obsoleto o no funcional tras un período de tiempo calculado por el fabricante. La obsolescencia planificada tiene un potencial considerable para beneficiar al fabricante dado que el producto va a fallar en algún momento, poniendo bajo presión al consumidor para que adquiera otro producto nuevamente,1 ya sea del mismo productor (mediante la adquisición de una parte para reemplazar y arreglar el viejo producto o mediante la compra de un modelo del mismo más nuevo), o de un competidor, factor decisivo que también se prevé en el proceso de obsolescencia planificada.

Más en la wikipedia (obsolescencia planificada / planned obsolescence), incluyendo la clasificación por tipos (técnica/funcional, baterías propietarias, obsolescencia sistémica y de estilo).

iPod con clickwheel, un caso investigado por su tendencia a fallar a los 18 meses
iPod con clickwheel, un caso investigado por su tendencia a fallar a los 18 meses

Es algo que me molesta bastante en según que casos, sobre todo en los que el aparato/servicio en cuestión sigue valiéndome y no siento la necesidad de cambio a la que me impulsa el fabricante. Esto produce una sensación bastante contradictoria: por un lado, está la repugnante estrategia del fabricante (por lo calculado del proceso) de intentar forzarte a adquirir un nuevo modelo a la fuerza, haciendo que el producto falle o se quede viejo (a propósito), y por el otro lado está la satisfacción con el producto que hace que tenga suficiente apego hacia él como para no interesarme demasiado el cambio.

Por ejemplo, me pasa con mi navegador GPS, un MioMap C220. Me gusta la hechura, es muy resistente (ha aguantado golpes, rascazos y demás sin inmutarse), suficientemente pequeño y ligero y responde bastante bien. Si acaso, le echo en falta algo de RAM, pero nada exagerado comparado con los navegadores actuales.

Los nuevos modelos no mejoran demasiado la situación desde mi punto de vista. Pantallas con más resolución o ligeramente más grandes, aumentando el peso del aparato bastante, así como su tamaño, y haciendo incómodo usarlo como GPS «de bolsillo».

Pero, sobre todo, lo que más me obliga al cambio no es el hardware, sino la carencia de actualizaciones del software para esta serie de modelos, incluyendo esto una no-actualización de los mapas bastante considerable. Desde que compré el GPS hará ya casi un par de años sólo hubo una actualización oficial de mapas, mientras que yo le he aplicado al menos 3 o 4 por métodos no oficiales, que son la única manera de actualizarlos para mi modelo…

Y como con los mapas los fabricantes no han conseguido forzar a la actualización de los mapas, han optado por actualizar también el software de navegación y cambiando el formato de los mapas, para que parezca una auténtica revolución que sólo está al alcance de los modelos más actuales… ¡cuando mi vetusto GPS (cuando lo compré no era ni muy reciente) puede mover sin demasiados problemas el software, más allá de ir un poco más lento, y poder funcionar con unos mapas actualizados en 2009!

Por otra parte, hay casos en los que sí siento/tengo/me creo/me trago la necesidad de la actualización sin tantas pegas al proceso de actualización forzosa, como con los teléfonos móviles, un campo en el que me gusta tener modelos al día. Supongo que será en parte porque en este campo los avances sí me resultan evidentes… o simplemente, una cuestión de preferencias, porque me imagino que habrá quienes actualicen el GPS al ritmo que marcan los fabricantes.

Otra cosa curiosa del preparado proceso de la obsolescencia planificada es quiénes pueden llevarlo a cabo. Los fabricantes «baratos» no creo que dediquen demasiados recursos a calcular el tiempo de vida que le van a dar a su producto y la manera de alcanzarlo, simplemente usarán los componentes más baratos para obtener un producto con el precio de mercado más ajustado posible, pero ese producto se notará «barato».

En cambio, los fabricantes de productos de una gama por encima o en situación dominante de mercado sí pueden dedicar esfuerzo (dinero, al fin y al cabo) en calcular cuál es el periodo medio de vida que les interesa dar a un producto para garantizarse que se las compras de la siguiente generación se «sincronizan» con sus planes. Para ello, se encargarán de introducir elementos a priori innecesarios o con propensión a fallar al cabo de determinado tiempo, de manera que la apariencia y sensación de calidad del producto seguirá siendo muy alta, porque dichos componentes no fallarán hasta que «les toque»…

Lógicamente la idea es que el producto falle fuera de garantía, para no suponer costes a la marca y que el cliente siga teniendo una imagen suficientemente buena de la marca como para repetir, aceptando el fallo como algo natural. Y lo que resulta sangrante es que los recursos que dedican a calcular cómo asegurarse una venta futura forzando el fallo de algo que venden como bueno podrían estar dedicándolo a mejorar (o al menos no empeorar!) el propio producto…

Mi experiencia con Internet Móvil

Desde que cogí el HTC Magic, llevo usando también una tarifa plana de datos de Vodafone, pero con la restricción de navegar solamente desde el móvil so pena de clavarme 40€, con lo cual lo cumplo bastante bien…

Tenía ganas de tener un plan de datos para tener internet siempre activo en el teléfono, tras haber tenido tarjetas de Simyo (que nunca llegaron a funcionar bien con la antigua HTC Diamond) y de Masmovil (sin ningún tipo de problema), pero que siempre usaba esporádicamente ya que mi número principal, en el que la gente me puede localizar, es el de Vodafone.

Una vez que cogí el plan que te obligan a coger al coger el Magic, he perdido un poco la necesidad de la tarjeta SIM adicional (que tampoco, ya que los precios internacionales tanto de datos como de voz son bastante interesantes con Masmovil), he podido unificar la SIM «de hablar» con la «de navegar», y es más o menos como lo imaginaba: una gozada.

Para la gente que se comunica conmigo es una facilidad tremenda, ya que me tienen por muchos más medios que antes y de una manera más inmediata: si antes podía tardar en responder un mail importante o en leerlo unas cuantas horas – el tiempo hasta estar delante de un PC, ahora es raro el momento en que no lo recibo al instante y, si procede, lo respondo. Otra cosa que facilita bastante es encontrarme para cosas pequeñas por Google Talk, ya que está integrado con el teléfono (y sin aumentar el consumo de batería demasiado). También se ha hecho más móvil mi uso de Twitter, ya que gracias a Twitdroid puedo subir fotos y tweets desde cualquier sitio en el que esté, y de vez en cuando subo fotos a flickr o picasa para recordar cosas que he visto.

Por supuesto otras cosas que me encanta tener siempre a mano, además del mail y de google talk, son google maps y el navegador, a secas. Es cierto que la navegación no es en ningún caso tan cómoda como con el PC, pero según van proliferando las webs con versiones «light» para iPhone y otros smartphones, el proceso de navegar se hace mucho más fluido, tanto porque se reduce la cantidad de datos (y cuando no tienes 3G y tiras de GPRS se agradece bastante), como porque se reduce su complejidad (y al menos el navegador de Android no se lleva muy bien con Javascripts complejos, o páginas con demasiado contendido, probablemente la navegación con el iPhone 3G – y más con el 3GS – sea más fluida o, al menos, se enmascare mejor su falta de fluidez).

A algunos tener tantas facilidades de comunicación les asusta, porque creen que los demás se dedicarán a espiarles, ver donde están con Google Latitude, o espiar su twitter y avasallarles por mail, mensajería instantánea y toda vía de contacto que se cruce por delante. En mi caso no se ha dado que ninguno de mis contactos haya sido un neurótico 2.0 con necesidad de estar incordiándome en todo momento, pero de cualquier forma cuando no quieres estar localizable o disponible, el proceso es tan simple como pulsar un botón de «Desconectar», poner el modo vuelo o, simplemente, apagar el teléfono.

Otros reniegan de la posibilidad de tener internet en su teléfono diciendo que, para eso, ya tienen un ordenador. En mi caso es muy cierto, trabajo mucho tiempo con el ordenador delante, pero las posibilidades de consulta que me da el teléfono por llevarlo encima son brutales. Horarios del cine, localizaciones u horarios de eventos, mapas, sitios a los que ir, correos con instrucciones para hacer algo… o cualquier otra información es a lo que internet en el bolsillo te da acceso en todo momento. Otra agradable opción es la de rellenar tiempos muertos… echar un vistazo a Facebook, Menéame, Google Reader o el periódico mientras esperas tu turno en una cola o a que llegue alguien te ameniza bastante las esperas…

Evidentemente, puede que no todo el mundo lo necesite, pero apostaría a que si a la hora de buscar información piensas antes en buscarlo en internet que en un periódico o guía, tener un teléfono con internet permanente sería algo a lo que te acostumbrarías con mucha naturalidad…

Cómo tener radio FM en el HTC Magic…

…o el día en que volví a ser feliz y pude (volver a ) oír al fin Radio 3 en el móvil. Y, de paso, cuando compré la primera aplicación del Android Market que no devolví o me arrepentí de ello…

Como comenté en el post de impresiones sobre el HTC Magic, estoy bastante contento con él, aparte de la calidad de fabricación de alguno de sus plásticos, que bien podría ser mejor y así tardarían más en ponerse a crujir cuando lo aprietas, o en aguantar una caída a medio metro de altura sin dejar marcas. Pero bueno, que no iban por ahí los tiros, sino por la manera de suplir una de las carencias del terminal, la ausencia de receptor de radio FM.

Yo la radio la uso bastante, porque paradójicamente en esta era de tanto MP3, vídeos en streaming en la que incluso puedo tener acceso a toda la música que tengo en casa desde el teléfono, a veces me canso de ella y me gusta que otros me descubran cosas nuevas, en concreto música. Y para ello, me gusta oír Radio 3 porque según a qué horas me gusta mucho la música que ponen y es raro que repitan canción no ya durante horas, sino durante días incluso, al contrario que en las repetitivas radiofórmulas.

Mi primera idea fue usar el streaming de la web de Radio 3, pero como funciona con flash y, de momento, no hay opción de reproducirlo, opté por intentar usar el stream en el que emiten (http://rtve.stream.flumotion.com/rtve/radio3.mp3.m3u), tal y como vi al abrirlo con VLC. Como no iba la cosa demasiado fina usando X, encontré un útil hilo de HTCManía en el que comparten las direcciones online de varias radios para usarlas con algún programa que reproduzca streams, por ejemplo el gratis Ant Player, que reproduce bien varias emisoras españolas y varias británicas que probé… pero no la que yo quería.

Para ello, compré OR Player, más que asequible por menos de 1€, mucho menos de lo que pagaría por oír Radio 3 mientras trabajo… Hay otras alternativas, pero 1€ es más que razonable por el servicio que da el OR Player, sin apenas cortes, buena calidad e interfaz bastante usable. De la batería no hablemos, con la conexión permanente abierta eso es un auténtico agujero negro voltaico.

El proceso de pagode una aplicación en el Android Market, por si alguien tiene curiosidad, es de lo más sencillo. Se usa la cuenta de Google Checkout (para los despistados, el «paypal» de Google), así se carga a la tarjeta de crédito que se escoja, sin tener que darle los datos a nadie más que a Google (total, si ya tiene toda mi información… y mejor en sus manos que en la de algún desalmado que me cargue cosas raras en la tarjeta xD). Tras el pago se puede descargar la aplicación (que no hay que comprar aunque se formatee el móvil), y se tienen 24h para devolverla y no recibir ningún cargo por ella.

Cuando la falta de usabilidad es un negocio…

Manual Fiat

Hay negocios en los que las carencias se transforman en un modo más de aprovecharse del cliente, a modo de modelo freemium pero fuera de internet, y sin que en ningún momento se te presente como tal. Uno de los ejemplos más claros son los coches…

Cuando compras un coche nuevo, la validez de la garantía está supeditada a que el vehículo pase las revisiones pertinentes (una anual normalmente) en el concesionario de la casa, o automáticamente se reservan el derecho de no realizar reparaciones aduciendo que el coche no ha sido verificado por ellos mismos. Hasta ahí puede valer, pasar unas revisiones en su taller de confianza para estar seguros de que el coche está correctamente y se hagan responsable de él.

Lo que no está tan bien es que tengas que acabar yendo al taller para reparaciones o intervenciones de lo más cotidiando, porque eso ya se acerca a lo que me parece un abuso. El primer caso fue un golpe que me dieron estando yo aparcado (y sin estar en el coche), metiendo un embellecedor del morro hacia adentro… Tras intentar colocarla de varias maneras distintas, acabé por preguntar en el taller, siendo la respuesta que eso era algo muy común, y había que desmontar la defensa entera para poder colocar la pestañita del plástico y que no se cayera. La gracia es que yo comenté al mecánico que eso era una mierda en cuanto a diseño… y el me dijo que en realidad para ellos estaba bien así, que el coche acababa por tener que volver tarde o temprano al taller… 38€ más IVA por una reparación «de lo más habitual», mal vamos.

Otro caso fue el cambio de una luz del habitáculo del coche. Imposible prácticamente sacar el plástico debido a las crípticas instrucciones del manual… y 8€ por cambiar una lámpara (2 minutos de trabajo, 1€ de bombilla). Y lo gracioso es que no me quisieron explicar exactamente cómo cambiarla…

Así que esta vez me empeciné en no pagarles por algo tan sencillo (a priori) como cambiar un piloto delantero fundido. Las instrucciones son tan espartanas como lo que se deja ver en la foto, frases que apenas describen los pasos a hacer pero sin llegar a ser suficientemente explicativas (al menos, la primera vez que hay que realizar la operació,  precisamente cuando el manual podría ser más útil).

Dado que en el taller verían darme información para realizar el cambio yo mismo, me fue de mucha más ayuda un foro. Manda huevos que haya sido de más utilidad la ayuda de gente desinteresada que la de mecánicos a los que habría pagado si me hiciesen el cambio y me dijisen como se hace… El resultado? Al final logré cambiar la bombilla, y el taller se quedó sin mis ~10€…