Y tu sabrás que mi nombre es Yavé

De Ezequiel, 25-17: El camino del hombre recto está por todos lados rodeado por la avaricia de los egoístas y la tiranía de los hombres malos. Bendito sea aquel pastor que, en nombre de la caridad y de la buena voluntad, saque a los débiles del Valle de la Oscuridad. Porque Él es el verdadero guardián de su hermano y el descubridor de los niños perdidos. ¡Y os aseguro que vendré a castigar con gran venganza y furiosa cólera a aquéllos que pretendan envenenar y destruir a mis hermanos! ¡¡¡Y TÚ SABRÁS QUE MI NOMBRE ES YAVÉ, CUANDO MI VENGANZA CAIGA SOBRE TI!!!

Jules Winnfield (Samuel L. Jackson) en Pulp Fiction

Efecto sonoro típico: El grito de Wilhelm

No sé si os habrá pasado alguna vez, pero hay efectos sonoros que se oyen en varias películas. Yo siempre identifico un sonido que usan para las patrullas de bomberos y el de las patrullas de policía, incluso los usaron en el juego SimCity (o al menos eso creí reconocer…).

Uno de estos efectos sonoros que se usan en diversas películas es el grito de Wilhelm. El grito se usó por primera vez en 1951, en la película Distant Drums y desde entonces se ha usado en muchísimas películas, series de TV e incluso videojuegos. En la wikipedia hay una lista de películas que usan este grito.

En este video podéis ver extractos de varias películas donde lo usan, resulta curioso verlas todas seguidas…

Si aún no lo habéis oido suficiente después de ver el video recopilatorio, aún podéis descargarlo aquí.

Vía Webmaníacos
Extra: lista de clichés sonoros en el cine

Elige tu vida

Elige la vida. Elige un empleo. Elige una carrera. Elige una familia. Elige un televisor grande que te cagas. Elige lavadoras, coches, equipos de compact disc y abrelatas eléctricos. Elige buena salud, colesterol bajo y seguro dental. Elige hipoteca a interés fijo. Elige un piso piloto. Elige a tus amigos. Elige ropa deportiva y maletas a juego. Elige pagar a plazos un traje de marca en una amplia gama de putos tejidos. Elige bricolaje y preguntarte quién coño eres los domingos por la mañana. Elige sentarte en el sofá a ver teleconcursos que embotan la mente y aplastan el espíritu mientras llenas tu boca de puta comida basura. Elige pudrirte de viejo cagándote y meándote encima en un asilo miserable, siendo una carga para los niñatos egoístas y hechos polvo que has engendrado para reemplazarte. Elige tu futuro. Elige la vida… ¿pero por qué iba yo a querer hacer algo así? Yo elegí no elegir la vida: elegí otra cosa. ¿Y las razones? No hay razones. ¿Quién necesita razones cuando tienes heroina?

Monólogo inicial de Trainspotting

Somos los hijos malditos de la historia

La publicidad nos hace desear coches y ropas, tenemos empleos que odiamos para comprar mierda que no necesitamos. Somos los hijos malditos de la historia, desarraigados y sin objetivos. No hemos sufrido una gran guerra, ni una depresión. Nuestra guerra es la guerra espiritual, nuestra gran depresión es nuestra vida. Crecimos con la televisión que nos hizo creer que algún día seriamos millonarios, dioses del cine o estrellas del rock, pero no lo seremos y poco a poco nos hemos dado cuenta y estamos, muy, muy cabreados.